Sad eyes

Hoy es uno de esos días en lo que no sé si reir o llorar. Y aunque no tenga motivos, ni para lo uno y ni para lo otro that´s the way I feel. Más bien tendría que estar contenta, un par de amigas han sacado notazas en sus exámenes, otra amiga ha encontrado un fantástico curro para el verano y dentro de poco más de un día habré terminado por fin toda esta etapa de "estudio" intensivo. Últimamente recuerdo demasiado a cierta persona y eso no me gusta nada. Pero es inevitable. Al menos, sé que Él nunca leerá esto.

Quiero que llegue el verano, o más bien el momento de irme a la playa. Seguramente iré con mis amigas a Benidorm, paraíso freak, poppy y cheli, pero que para nosotras puede resultar ciertamente divertido. Un apartamento para las cinco. Quién sabe cómo acabaremos... Pero estoy segura de que siempre nos acordaremos, porque ya llevamos unos cuantos años intentando ir juntas de vacaciones y nunca sale bien. Tocaré madera. Pero mientras eso llega tengo que hacer un último esfuerzo, el tirón final con el puñetero Derecho Mercantil que está resultando mucho más coñazo de lo que en un principio parecía.

La foto de arriba es de la playa de La Barrosa, en Chiclana (Cádiz). Cortesía de mi amigo Nando y retoque propio. Quizás vaya este año allí.

El cielo está cansado ya de ver
la lluvia caer
y cada da que pasa es uno más
parecido a ayer
no encuentro forma a alguna de
olvidarte porque
seguir amándote es inevitable.